Meditación para poder comer mejor

Meditación para poder comer mejor

Alimentarse bien es la base para tener la mejor salud, física y mental. Por ello en muchas ocasiones el estrés nos lleva a picar entre horas o comer más de la cuenta con el fin de intentar paliar esa preocupación que nos corroe.

Las prácticas que puedes llevar a cabo para poder mejorar tus hábitos alimenticios son múltiples, sin embargo cabe destacar aquella basada en la meditación. Es por ello que cada vez son más las personas que acuden a clases de meditación en Sevilla con el fin de poder controlar aquello que comen.

Realizar actividades de meditación puede llegar a reducir nuestros niveles de estrés y ansiedad considerablemente. También influye favorablemente en nuestra capacidad de concentración, dando lugar a la creación de toda una serie de respuestas reflexivas en lugar de impulsivas.

Por ello, a través de esta práctica podemos llegar a ser conscientes en todo momento de lo que estamos comiendo. No significa por su parte seguir una dieta o estar pendiente de lo que comemos, más bien está basado en el hecho de disfrutar sobre lo que estamos ingiriendo en ese momento. De esta forma será muy fácil saber si necesitamos comer más o nos encontramos saciados.

Hay que conocer en todo momento cuando tenemos hambre y cuando se trata de estrés. Aportas ofrece clases de meditación en Sevilla orientadas a la exploración de tu propia personalidad y la detección de este tipo de problemas. Cuando tenemos estrés, nuestro cerebro funciona con los mismos mecanismos que si tuvieras hambre por lo que te apetecen comidas que satisfagan necesidades de forma rápida. El hambre no existe, es más bien nervios, ansiedad o aburrimiento.

También conlleva un mejor saboreamiento de la comida. No se trata de engullir ni comer de forma brusca. Hay que centrarse en el olor y sabor de aquello que vamos a tomar. Darte un gusto gastronómico aunque no sea sano no es ningún crimen, lo importante es que sepas compensarlo con comida más saludable.

Anímate a comenzar esta práctica que a día de hoy no deja de sorprender a aquellos que se atreven con ella. Disfruta de una nueva forma de comer, haciéndolo con tranquilidad y concentrándote en aquello que ocurre en tu interior.